martes, 10 de abril de 2007

Juegos Verbales

El profesor separa al curso en dos grupos. Se les explica que él será su guía y que la idea, es que él, les irá dando la categoría, para que los niños a partir de esta, vayan diciendo la mayor cantidad de palabras que conozcan.
La idea es la siguiente: Una vez que estén los grupos formados, el profesor dirá; Díganme objetos que se vendan en ………………… y que comiencen con la letra ………. Ganará el grupo que logre decir más palabras aciertas en menor tiempo.
NOTA: El profesor debe dar por lo menos cuatro categorías distintas.

Ejemplos:
1. Objetos que se vendan en una librería que comiencen con la letra “C”.
Los niños deben decir:

  • Carpetas
  • Cartón
  • Cartulina
  • Cuadernos
  • Clip
  • Corchetes
  • Etc.

    2. Objetos que se vendan en un Supermercado que comiencen con la letra “P”.
    Los niños deben decir:
  • Pan
  • Pañuelos
  • Pañales
  • Pescado
  • Pasteles
  • Porotos
  • Etc.

Desarrollo del escuchar y del lenguaje oral en NB1: Algunas consideraciones metodológicas.

Paz Baeza Bishoffshausen
María Cristina Solís Zañartu.


El escuchar es una habilidad lingüística que posee variadas dimensiones. Se escucha “realmente”, cuando se reacciona significativamente a lo escuchado.

Consideraciones metodológicas:
Es importante que el docente desarrolle en los niños una actitud positiva frente al escuchar.
El educador debe generar, en el aula, situaciones que permitan desarrollar el escuchar.
El educador al trabajar en un programa de desarrollo del escuchar y del lenguaje oral, debiera:
- Dar instrucciones claras y simples.
- No repetir las instrucciones más de lo necesario.
- Utilizar una señal para llamar la atención del grupo (evitando gritar).
- Hacer pausas silenciosas al inicio de las actividades
- Recompensar el escuchar a través de elogios.
- No interrumpir a sus alumnos con el fin de corregir o aportar ideas
- Realizar con los niños diferentes actividades que estimulen el escuchar atencional, analítico y apreciativo.
El docente debe aportar múltiples experiencias que permitan a los alumnos enriquecer su vocabulario a través de:
- Descripciones
- Visitas a diferentes lugares
- La lectura de cuentos
- La búsqueda de palabras.
Es importante que en el aula, los profesores generen situaciones para que los niños puedan conversar en forma libre.
El docente debe propiciar instancias que estimulen a los niños a tomar la palabra y a sostener discusiones acordes a su edad.

Los libros constituyen un excelente medio para desarrollar múltiples objetivos en el NB1. La lectura de cuentos da lugar a un intercambio rico y complejo entre educador, libro y niños. Se a comprobado que los niños a los que les leen cuentos con frecuencia tanto en el hogar como e la escuela, alcanzan mayores logros en el aprendizaje de la lectura y la escritura. Una de las mejores formas de interesar a los niños en los libros es leerles frecuentemente.
La literatura realiza un gran aporte en el desarrollo del niño debido a que:
- Produce agrado.
- Desarrolla la imaginación.
- Desarrolla el lenguaje: Numéricos estudios han comprobado que los niños que están en contacto con la literatura poseen un lenguaje rico en matices, vocabulario y expresiones, además que mejoran notablemente en lectura, comprensión de lectura y expresión escrita.
- Provee experiencias vicarias.
- Ayuda a comprender las conductas humanas.
- Favorece la creación literaria.
- Desarrolla el pensamiento.
- Permite adquirir conocimientos.
- Favorece el juicio valórico.
- Desarrolla el juicio estético.

Consideraciones metodológicas:
Es importante que el docente dedique tiempo para seleccionar poemas y cuentos tanto para ser leídos por el niño como narrados por un adulto.
- Selección de cuentos: Los libros deben ser equilibrados, entre los diálogos y la acción. La descripción del ambiente y de los personajes debe ser breve y esencial La historia debe ser simple y debe tener un final resuelto.
- Selección de poemas: los poemas deben tener; Un ritmo regular y bien marcado, pausas precisas y rima fluida. Una extensión breve. Se recomienda utilizar una temática cercana a las experiencias de los niños.

El educador debe considerar varios aspectos relevantes al narrar o leer un cuento a sus alumnos:
Selección del cuento: De acuerdo a la edad de los niños.
Condiciones del narrador: Debe tener buena memoria, debe conocer muy bien el cuento, debe usar una voz flexible, clara y rica en matices, debe aprovechar los gestos del rostro y las manos, debe utilizar pausas, el suspenso y las onomatopeyas.
Ambiente: Preferentemente uno que proporcione un clima tranquilo y cálido.

El educador de NB1 debe rescatar la poesía y fomentar el gusto por leerlas y escucharlas.
El profesor debe transformarse en un buen lector de poemas.
El profesor debe considerar dentro de sus actividades periódicas la dramatización como una estrategia de alto valor educativo.

La música una invitación a escuchar, al lenguaje y al aprendizaje.

Paul Madaule, L. Ps.

Los niños que no muestran interés por la música, en general, resultan ser los mismos niños que a manudo muestran bajos rendimientos en otras áreas del aprendizaje.

Tomatis señala que oír y escuchar son dos funciones que implican mecanismos diferentes. Oír es la percepción pasiva de los sonidos y escuchar es un acto voluntario que requiere del deseo de usar el oído para enfocar los sonidos seleccionados.
La función del escuchar esta íntimamente relacionada con el lapso de atención, el cuidado y la concentración. Desempeña un papel predominante en la integración, comprensión y retención de mensajes de sonidos.
Escuchar es de vital importancia en el proceso de aprendizaje.
El desarrollo del lenguaje en los niños es en sí un proceso de aprendizaje durante el cual el escuchar tiene un rol esencial.
El ejercicio de escucharse a si mismo, es el punto de partida para la adquisición del lenguaje oral. El lenguaje oral del niño debe estar bien establecido para cuando comienza con el lenguaje escrito en la escuela.

La música esta compuesta por dos elementos: El ritmo y la Melodía.
El oído interno consiste de dos partes: El Sistema Vestibular; encargado de controlar el equilibrio y los movimientos corporales (también permite la integración de movimientos que forman el ritmo de la música) y El Sistema Coclear; que permite la transformación de vibraciones acústicas en influjos nerviosos, y, por los tanto, permite la percepción de la melodía.
El escuchar música es una manera excelente de que el niño aprenda a percibir sonidos de manera organizada, o en otras palabras, a escuchar.
Las principales características de la música, específicamente el tono, el timbre, la intensidad y el ritmo, se encuentran en el lenguaje oral. Por esto, la música prepara al oído, la voz y el cuerpo del niño a escuchar, integrar y emitir sonidos del lenguaje. La música puede ser considerada como un lenguaje “pre-lingüístico”, ya que tiene todas las características del lenguaje oral excepto por el valor semántico.
Las canciones y versos infantiles armonizan los movimientos corporales y funciones motoras por su efecto en el sistema vestibular del oído. También aumentan el nivel de conciencia que el niño tiene de su cuerpo y ayudan a moldear su imagen corporal.
Un niño con problemas de escucha no puede sacar provecho de la mayor parte de los efectos de la música. Este niño, seguramente, tendrá problemas para leer, deletrear y quizá también para la aritmética, y es probable que sea diagnosticado como un niño disléxico o con problemas de aprendizaje.

El propósito del método Tomatis es el de mejorar la capacidad para escuchar y reducir los problemas relacionados con escuchar.
El método Tomatis es un programa de entrenamiento auditivo en fases. Cada fase corresponde a una de las etapas del desarrollo del proceso de aprendizaje.
Normalmente se usan cuatro tipos de información musical durante el programa de escucha:

1. Música de Mozart: Las partituras de Mozart parecen lograr el más perfecto equilibrio entre los efectos relajantes y vigorizadores del sonido.
La música filtrada de Mozart se utiliza en todas las etapas del programa. Durante la fase pasiva del programa, prepara al niño a escuchar y comunicarse. Relaja al niño y al mismo tiempo lo despierta al mundo de los sonidos. Durante la fase activa, la música filtrada, se usa para permitir que el niño se relaje, combinada con el canto, la repetición de las palabras y los ejercicios de lectura.
2. Cantos Gregorianos: El ritmo del canto gregoriano es comparable al “ritmo” fisiológico de una persona tranquila. El canto gregoriano se utiliza en el programa para tranquilizar a niños impulsivos, irritables, tensos o inquietos.
3. Las canciones Infantiles: El rol de las canciones infantiles con números, los versos y otras son la invitación al lenguaje.

El uso del método Tomatis relaja y vigoriza al niño, estimula su capacidad de escuchar y, así lo invita a comunicarse y a aprender.

Escuchar: Una habilidad que es necesario enseñar.

Saber escuchar es una cualidad altamente valorada en la sociedad, ya que permite establecer buenas relaciones personales y sociales.
Según investigaciones, más del 80% de las personas tiene dificultad para escuchar con atención y respetar opiniones ajenas.
El escuchar es un objetivo que se considera fundamental para el logro de los aprendizajes de los estudiantes.
Los profesores se quejan que los niños no saben escuchar.
En el aula se puede observar una ausencia de enseñanza sistemática del saber escuchar, además de un tipo de relación que no favorece su desarrollo, lo que provoca problemas e interferencias en la interrelación de los estudiantes entre sí y dificultades para relacionarse con sus profesores.
El escuchar es una función lingüística básica que se desarrolla tempranamente y en el que juega un papel importante la familia. Se convierte el lenguaje hablado en imágenes mentales significativas.
Los niños aprenden a escuchar en función de los eventos de conversación en los que han participado. Estas interacciones les permiten apropiarse, en contextos significativos, tanto de las reglas sintácticas, semánticas y fonológicas del lenguaje.
Aprender a escuchar, permite aprender modos de actuar y redirigirse a los demás; reconocer gestos o tonos de voz; significados de las palabras en distintas circunstancias.

Se observan cuatro formas de escuchar:
1. El escuchar atencional: Se refiere a focalizar la atención en un estímulo para obtener alguna información.
2. El escuchar analítico: Se utiliza cuando se analiza lo escuchado para resolver algo.
3. El escuchar apreciativo: Es aquel que se realiza por el goce o deleite de escuchar.
4. El escuchar marginal: Es el que permite captar otros estímulos además del foco que es centro de la atención.

En la escuela generalmente se desarrolla el escuchar atencional.
El docente, al planificar actividades que permiten desarrollar esta actividad en forma sistemática, debe considerar que los niños toman conciencia de la importancia de escuchar para el trabajo escolar y personal y de lo que significa el silencio en un medio saturado de ruidos.

Es importante tener en cuenta que los niños escuchan mejor:
- En las primeras horas de la mañana.
- Si lo que se les cuenta tiene sentido para ellos.
- Cuando las actividades tienen un propósito claro.
- Si las actividades son dinámicas y variadas.
- Cuando se les da la posibilidad de participar activamente en las actividades.
- Si se les presenta la información en forma amena y variada.
- Cuando se les permite opinar y expresar sus ideas y sentimientos.

El docente debe tener en cuenta que:
- Su papel debe ser siempre el de un auditor modelo.
- No debe repetir más de una o dos veces las instrucciones que da.
- Es necesario realizar actividades que apunten a los distintos niveles de escuchar.


Un buen entrenamiento en la capacidad de escuchar comprensivamente beneficiaría las habilidades lectoras.
Un buen desarrollo de la capacidad de escuchar facilita la integración social en el aula, permitiendo a los niños conocer y respetar distintas opiniones e interactuar de acuerdo a ciertas normas de convivencia que son necesarias para la construcción de los aprendizajes.