miércoles, 13 de junio de 2007

Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC: lectura compartida

Paz Baeza Bischoffshausen
María Cristina Solís
Tonia Razmilic Burgos

La lectura compartida es una estrategia para la enseñanza y el aprendizaje de la lectura, a través de la cual el profesor y los alumnos comparten la tarea de leer y aprender utilizando un texto visible para todos. Al utilizar la lectura compartida, los profesores demuestran el proceso y las estrategias de lectura que usan los lectores expertos, identifican y discuten con los alumnos las convenciones, estructuras y características del lenguaje de los textos escritos y los estudiantes aprenden a interrogar el texto, a buscar las diferentes claves que cada texto aporta y a interpretar las ilustraciones, diagramas y esquemas. Esta estrategia brinda la oportunidad de que todos los alumnos participen exitosamente en la lectura.
Numerosas investigaciones han demostrado que la Lectura Compartida es una estrategia muy efectiva, debido a su principal característica que es la relectura, Existe evidencia de que:
Los relecturas aumentan la comprensión lectora.
Aumenta el vocabulario.
Ayuda a los estudiantes a entender y recordar más conceptos.
Las lecturas repetidas ayudan a los estudiantes a tener más confianza en sus lecturas y es una actividad en la que quieren participar.
Releer ayuda más a la velocidad de lectura y a la fluidez que los programas que se centran en enseñar letras, sonidos y palabras en aislado.
La repetición tiene mejores efectos si las palabras no están aisladas.
La práctica les da la oportunidad a los lectores iniciales de alcanzar un nivel automático de decodificación para que ellos puedan poner atención a la comprensión del mensaje.
Las relecturas aumentan los conocimientos de los niños, tanto de contenidos como de estrategias, aumentan su motivación para leer y proveen de un modelo y de práctica para la fluidez.
En los últimos años, variadas investigaciones han comprobado la importancia e incidencia que tiene la fluidez en la lectura en la comprensión lectora, es por ello que a través de la lectura Compartida el maestro tiene la mejor oportunidad de modelar la fluidez y por otra parte, dado que los alumnos leerán varias veces el mismo texto, este hecho les permitirá hacerlo con mayor fluidez y facilidad.
La Lectura Compartida dentro del programa AILEM significa buscar un espacio dentro de la sala de clases donde los niños puedan sentarse cerca unos de otros, del profesor y del material que se utilizará.
Las normas y los hábitos desarrollados por los alumnos son claves para que esta estrategia tenga éxito.
Es importante que todos los alumnos puedan ver y leer el texto desde donde estén ubicados.

La lectura Compartida tiene tres pasos:
1. Presentación del texto
- El profesor debe reunir a toda la clase de manera que todos los niños estén cerca y vean el texto (ambiente lleno de confianza y seguridad).
- Si se trata de un libro gigante, el profesor debe mostrar a los niños la portada del libro, su autor, su ilustrador y ambos deben discutir la ilustración y el título (predicción).
- Los textos deben estar escritos con letras de tamaño apropiado para que todos los niños los vean.

2. Relectura del texto.
El profesor debe leer el texto en conjunto con los alumnos, guiando la lectura con un puntero, pero al principio, es importante que el niño se sienta libre de no participar verbalmente si así lo prefiere.
El objetivo es:
- Incrementar la participación del grupo.
- Enseñar estrategias de lectura.
- Recordar vocabulario, ideas principales o información del texto
- Apreciar el estilo y punto de vista del autor
- Reglas de ortografía, puntuación y presentación
- Trabajar diferentes focos de enseñanza
- Identificar diferentes tipos de textos, reconociendo sus características peculiares.

3. Lectura Independiente.
Se sugiere tener un colgador de lecturas compartidas, para que los niños lean por si mismos, los textos previamente trabajados y leídos en clases.

Algunos focos de enseñanza de la lectura posibles de trabajar son:
- En lectores iniciales:
Principio del alfabeto.
Conceptos acerca de lo impreso.
Conciencia fonológica y fonética.
- En lectores más avanzados:
Convenciones del lenguaje escrito.
Habilidades avanzadas de la lectura.

A través de una lectura compartida, se pueden enseñar:
- Estrategias de lectura:
Un buen lector es aquel que utiliza las tres fuentes de información: visual, significado y estructura; apropiadamente en una tarea particular de lectura.
Para la comprensión de un texto se utilizan las tres fuentes de información, utilizando diferentes estrategias: localizar, predecir, verificar, y confirmar.
- Predicciones:
Para poder predecir qué palabra sigue en un texto debemos usar las tres fuentes de información que nos da el texto; el significado, la estructura del lenguaje y la información visual.
- Autocorrecciones:
Si un niño lee algo que no tiene sentido y no se autocorrige, la maestra debe intervenir para lograr la corrección al final de la frase o la oración.
- Habilidades para trabajar con palabras:
Una habilidad importante es identificar una palabra conocida en un texto.
- Reglas de puntuación:
Se puede dirigir la atención de los niños a las funciones de los signos de puntuación durante las relecturas.
- Reglas de ortografía:
Se puede centrar la atención en reglas de ortografía y dar ejemplos de su uso correcto.
- Reglas de gramática:
Se puede enseñar cómo el autor usa la gramática en un texto.
- Convenciones de direccionalidad:
Los niños aprenden que la dirección de lo impreso va de izquierda a derecha y de arriba abajo, que la página izquierda se lee antes que la derecha y que las páginas se cambian hacia la derecha.
- Organización y presentación:
Los textos tienen distinta organización y presentación.

¿Qué se puede leer?:
Los libros grandes no son el único texto que puede utilizarse en la lectura compartida. Pueden utilizarse cartulinas donde se escribe con letra clara y amplia rimas, canciones, poemas, una historia breve, fábulas, noticias, problemas, etc.
Lo más importante del texto que se utilice es que las letras sean lo suficientemente grandes para que todos los niños de la clase puedan observarlo y leerlo.

Materiales que se pueden utilizar para complementar una lectura compartida:
* Punteros de diversos tamaños y formas.
* Post-it notes.
* Tarjetas de varios tamaños.
* Tiras de plasticina para enmarcar.
* Cinta para resaltar o cubrir.
* Matamoscas (para cazar palabras).
* Plumones.

Preparación de una lectura compartida:
El profesor elige cuidadosamente el texto que le ayudará a cumplir lo que se ha planteado previamente en su planificación. Se deben conocer los textos y materiales que se usarán en esta actividad y tener una lista de habilidades y estrategias que pueden ser enseñadas a partir de cada uno, dependiendo del conocimiento previo de los niños, y el plan de estudios. Se debe de planear cuándo y cómo introducir estas habilidades a los niños tomando en cuenta sus intereses y necesidades.
Para preparar una lectura compartida, es importante que el profesor:
1. Decida sobre el foco de enseñanza.
2. Seleccione un texto apropiado.

Momentos de la clase:
Antes de la lectura:

Se sugiere al profesor:
- Recordar las normas de conducta que deben seguirse cuando se realiza una lectura compartida.
- Guiar las predicciones a partir del título, de una palabra clave, del nombre de un personaje o del tema.
- Formular preguntas para activar los conocimientos previos de los alumnos en relación con el tema presente en el texto con el fin de que establezcan conexiones.
- Conversar acerca del autor del texto, la época en que vivió, sus motivaciones para escribir entre otros.
- Guiar la comprensión tomando en consideración las características de la estructura del texto.

Durante la lectura:
El profesor debe:
- Releer el texto junto con los alumnos.
- Formular preguntas con el fin de fomentar la discusión acerca del contenido del texto.
- Destacar algunas palabras con el fin de desarrollar destrezas.
- Detenerse y formular preguntas para evaluar la comprensión del texto.
- Formular preguntas para que los alumnos predigan lo que sigue en el texto sin desviarse del foco de enseñanza.

Después de la lectura:
- Al finalizar la lectura el profesor debe hacer comentarios sobre la intención o mensaje del autor y discutir la relación del cuento con la vida real de los niños.
- El profesor debe planear otras actividades a partir de la lectura compartida.

domingo, 10 de junio de 2007

Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC: Escritura Interactiva.

Paz Baeza Bischoffshausen
María Cristina Solís
Emy Suzuki Sone
Tonia Razmil
ic Burgos


La escritura Interactiva es una estrategia colaborativa en la que el profesor y los niños conjuntamente, componen y escriben un texto.
El profesor utiliza la sesión de Escritura Interactiva para modelar las habilidades de lectura y de escritura cuando él y los niños construyen un texto.

Existen tres tipos de Escritura Interactiva:

  1. Transcripción o reconstrucción de un texto existente.
  2. Innovación o cambio de un texto familiar.
  3. Negociación (composición original).

El aprendizaje de la escritura contribuye al desarrollo de las habilidades para la lectura. Cuando los niños tratan de escribir dirigen su pensamiento hacia aspectos del lenguaje escrito.
Para aprender a escribir es fundamental que los niños aprendan las letras del alfabeto: sus nombres, formas y sonidos.
La Escritura Interactiva puede ser utilizada para demostrar conceptos acerca de lo impreso, desarrollar estrategias y aprender acerca de cómo funcionan las palabras.
La escritura interactiva es una oportunidad única de ayudar a los niños a ver la relación entre la lectura y la escritura.

La escritura interactiva sirve para:

  • Componer un texto a través de la transcripción, innovación o negociación.
  • Demostrar conceptos acerca de lo impreso, desarrollar estrategias y aprender acerca de cómo funcionan las palabras.
  • Proveer a los niños de oportunidades para escuchar los sonidos de las palabras.
  • Involucrar a los alumnos en el proceso de codificar al escribir y el de decodificar al leer.
  • Ver la relación entre la lectura y la escritura.
  • Obtener un texto libre de errores que se construye con la colaboración de todos los alumnos y del profesor.
  • Proporcionar la oportunidad de leer y releer un texto.
  • Enseñar en forma explícita y directa aspectos fonológicos y análisis de las palabras.
  • Enseñar cómo funcionan los textos escritos.
  • Enseñar las conexiones entre lo que se lee y lo que se escribe.
  • Los alumnos aprenden que la estructura de las oraciones y la forma de colocar las palabras dentro de ellas determinarán el significado de éstas.
  • Los niños aprenden cómo escribir, al mismo tiempo que toman conciencia de cómo los escritores utilizan la lengua para aprender, para comunicarse y para disfrutar.

La Escritura interactiva es una estrategia utilizada por el grupo completo (curso) dentro del programa AILEM y como otras estrategias de grupo completo deben trabajarse en proximidad.
Los niños deben sentarse cerca unos de otros, del profesor y del material que se utilizará (papelógrafo).
Las normas y los hábitos desarrollados por los alumnos son claves para que esta estrategia tenga éxito.
Es de gran importancia que los profesores observen constantemente a sus alumnos y tengan muy claro en qué nivel de escritura está cada uno (estrategias flexibles).
La escritura interactiva permite que cada niño escriba lo que sabe escribir y aprenda lo que aun le falta por aprender.

Los pasos de una escritura interactiva son:
Paso 1: Los niños en general, se sientan en el piso en frente de un pliego de papel que se utilizará para la escritura. Se utiliza una actividad grupal para comenzar el proceso de Escritura Interactiva.
Paso 2: Se debe animar a los niños a compartir sus experiencias en relación con la historia o a expresar sus opiniones.
Paso 3: El profesor debe decir a los niños que le gustaría que ellos escribieran acerca de sus ideas relacionadas a la historia o la actividad. El profesor pide a los niños que le den sugerencias acerca de lo que escribirán.
Paso 4: El profesor debe desarrollar un consenso acerca de las palabras exactas que se utilizarán (negociación).
Paso 5: Se debe repetir la oración y mencionar cada palabra cuidadosamente.
Paso 6: El profesor debe anotar las palabras exactas que se han negociado.
Paso 7: Cuando el profesor le pida a un niño que pase a escribir, debe asegurarse de que éste tendrá éxito.
Paso 8: El profesor debe utilizar varios métodos para ayudar a los niños a pensar acerca de las palabras y cómo se construyen (estirar palabras y analogías).
Paso 9: El profesor debe decir a los niños que algunas palabras se utilizan con tal frecuencia que necesitamos memorizarlas y tenerlas en nuestra cabeza.
Paso 10: El profesor debe repetir los pasos 8 y 9.
Paso 11: A medida que los niños pasan a escribir en el papel, el profesor deberá enfocarse en el grupo y atacar puntos de enseñanza específicos.
Paso 12: El profesor deberá hacer mini-lecciones como una extensión del paso 11.
Paso 13: El profesor debe dirigir la atención de los niños a otras escrituras en el salón, que apoye los puntos de enseñanza que se están tocando (paredes de palabras, lecturas compartidas, escrituras interactivas previas, o cualquier texto con letra grande que esté en el salón y con la que los niños estén familiarizados).
Paso 14: El profesor debe releer el trabajo con los niños después de cada frase añadida al texto.
Paso 15: El profesor debe releer el texto y modelar la fluidez.
Paso 16: El profesor deberá mostrar la escritura terminada.

A través de una escritura interactiva se puede enseñar:

  • Conceptos acerca de lo impreso y cómo funcionan las palabras.
  • Cómo escuchar los sonidos en las palabras y conectar los sonidos con las letras.
  • Codificación y decodificación de la lectura y la escritura.
  • Cómo escribir variados tipos de textos.
  • Redacción, ortografía y gramática.
  • Cualquier contenido de cualquier subsector.

El tipo de texto que se escriba con los niños en escritura interactiva debe ser acorde con el propósito de aprendizaje que lograrán los estudiantes y el tema adecuado a sus intereses.

Textos adecuados al nivel de:
Kinder, Primero y Segundo:

  • Función informativa: Invitaciones, aviso
  • Función heurística : Problemas matemáticos
  • Función normativa: Normas del curso, normas para la lectura compartida o para la escritura interactiva, etc.
  • Función expresiva: Rimas, mensajes.

Tercero y Cuarto:

  • Función informativa: Cartas, noticias, resúmenes, organizadores gráficos, invitaciones, aviso de ventas Horarios.
  • Función heurística: Problemas matemáticos, registros de observación de crecimiento de plantas u otros experimentos.
  • Función expresiva: Versos, chistes, mensajes, Tarjetas de bienvenida, despedida.
  • Función apelativa: Diálogos, afiches.
  • Función normativa: Reglamento del curso, normas de convivencia, normas para la lectura compartida o para la escritura interactiva.

Los textos producidos en la escritura interactiva pueden ser el medio para lograr diferentes aprendizajes.
Los materiales se necesitan para realizar una escritura Interactiva son:

  • Pliego de papel con dobleces para realizar la escritura.
  • Plumones de varios colores.
  • Masking tape o tiras de papel para pegar encima de las palabras mal escritas.
  • Pizarra pequeña para apoyar el trabajo del resto del grupo.
  • Puntero.
  • Abecedario completo.
  • Pared de palabras al alcance de la vista.

En la preparación de la escritura interactiva se debe:

  • Organizar la distribución física de los niños.
  • Tener el papelógrafo preparado, al igual que el material de corrección.
  • Reglas claras de cómo se sientan, cómo participan, cómo hablan.
  • Tener planificado lo que se va a escribir.
  • Tener planificados los puntos de enseñanza.

Momentos de la clase:

Antes de la escritura, se debe:

  • Preparar la sala de clases dejando un espacio para realizar la escritura interactiva.
  • Establecer el o los propósitos instruccionales.
  • Recordar las normas establecidas para una escritura interactiva.
  • Elegir en conjunto con los alumnos el tipo de escritura que se hará:
    - Transcripción.
    - Innovación.
    - Negociación.
  • Seleccionar el formato.

Durante la lectura se debe:

  • Negociar, negociar y negociar lo que se escribe.
  • Establecer y repetir la oración negociada (palabras exactas).
  • Empezar con la primera palabra/letra o primeras palabras, asegurándose de que esté claro dónde escribimos y el tamaño de la letra.
  • Seleccionar a los alumnos adecuadamente.
  • Establecer qué necesitamos saber para escribir.
  • Al entregar el plumón, el profesor debe ocuparse del resto de los alumnos mientras un niño escribe.
  • Colaborar en la construcción del texto.
  • Dirigir la discusión en los momentos de discusión.
  • Releer la oración cada vez.

Después de la escritura se debe:

  • Leer el texto completo junto con los niños.
  • Verificar en conjunto con los alumnos la ausencia de errores ortográficos.
  • Ubicar el texto escrito en un lugar visible de la sala de clases.

Estrategias de enseñanza del programa AILEM-UC: Lectura en voz alta

Paz Baeza Bischoffshausen
Tonia Razmilic Burgos


La lectura en voz alta es una estrategia de enseñanza, mediante la cual el profesor lee a los niños un texto previamente seleccionado y cuidadosamente preparado. Este texto puede ser de ficción o no ficción.
A través de la lectura en voz alta se puede modelar el aprecio por la lectura y que los estudiantes tomen conciencia que leer es una actividad para disfrutarla.
La lectura en voz alta es el momento para que el profesor les enseñe a sus alumnos estrategias específicas de lectura, conceptos acerca de lo impreso, cómo funcionan los textos y el vocabulario.
La lectura en voz alta es considerada como uno de los factores más influyentes para el desarrollo integral del niño.
La lectura es un proceso que toma tiempo y requiere de un espacio para tener contacto con ella y la única forma para lograr su aprendizaje es a través de la práctica.
No cualquier lectura en voz alta desarrolla el lenguaje ni es una experiencia educativa efectiva.
La intención de la lectura en voz alta, es dar un vuelco a la manera en que les leemos a los niños y lograr que ésta sea una actividad mucho más interactiva, donde los niños puedan hacer comentarios espontáneos a medida que avanza la lectura a la vez que el profesor plantea preguntas adecuadas con el fin de lograr los aprendizajes esperados.
Mediante la lectura en voz alta los niños mejoran su capacidad de atención y memoria.
Las ventajas de la lectura en voz alta están en que esta:

  • Permite establecer un contacto emocional y físico entre el educador, el niño y el libro.
  • Favorece el escuchar atencional, analítico y apreciativo.
  • Desarrolla en los alumnos estrategias de lectura.
  • Crea un clima de confianza entre los alumnos.
  • Amplía el .
  • Amplía su horizonte cultural.
  • Desarrolla la imaginación.
  • Favorece las relaciones sociales y ofrece una excelente oportunidad para el desarrollo del lenguaje oral.
  • Se crean lazos afectivos entre el adulto y el niño.
  • Desarrolla aspectos morfosintácticos y semánticos.
  • Se desarrolla el goce estético.
  • Facilita el aprendizaje de la lectura y escritura.
  • Aprenden cómo funciona un libro, los procesos y estrategias de lectura.
  • Mejora la atención, comprensión y memoria.
  • Desarrolla el gusto por la lectura.

El objetivo es crear un clima cálido, de confianza e intimidad entre todos los participantes, de esta manera fomentamos la discusión y conversación alrededor de la lectura.
Las normas y los hábitos desarrollados por los alumnos son clave para que esta estrategia tenga éxito.
Si el texto tiene ilustraciones será importante que todos las puedan ver desde donde están sentados.

El rol del profesor es:

  • Escoger, entre la literatura de calidad, los libros que se relacionen con el tema que esté tratándose en la unidad y con los intereses de sus alumnos.
  • Señala los propósitos de esa lectura.
  • Recordar las normas que deben respetarse durante una lectura en voz alta.
  • Promover las predicciones.
  • Leer con la fluidez y la entonación adecuada.
  • Mostrar las ilustraciones.
  • Puede interrumpir la lectura para verificar las predicciones o para realizar nuevas.
  • Después de la lectura puede fomentar discusiones diferentes y valiosas en torno a él, o proyectar otras actividades relacionadas con la lectura.

Algunas estrategias de lectura posibles de enseñar son:

  • Uso de conocimientos previos.
  • Conectar información.
  • Predecir.
  • Clarificar.

Antes de leer el profesor debe:

  • Elegir cuidadosamente el texto que le ayudará a cumplir lo que se ha planteado previamente en su planificación.
  • Leer y releer el texto varias veces.
  • Decidir qué estrategias de comprensión va a trabajar en cada sesión de lectura.
  • Definir dónde querrá detenerse en el texto.

Durante la lectura el profesor debe:

  • Hacer una introducción al texto seleccionado y preparar a los niños para la actividad.
  • Generar temas de discusión y entablar conversaciones con los niños para promover la mejor comprensión del texto y lograr los aprendizajes planificados.
  • Mostrar ilustraciones.
  • Detener lectura para crear nuevas predicciones.
  • Detener lectura para retomar atención y comprobar lo que han entendido.
  • Aceptar los comentarios que hagan, valore sus aportaciones y relaciónelas con el texto.
  • Pensar previamente en las metas que estableció para elegir determinada lectura y dirija la discusión en esa dirección, acepte los comentarios pero no se desvíe de su objetivo principal.
  • Estar pendiente.

El profesor después de la lectura debe:

  • Dejar un momento para “reposar” la lectura.
  • Dejar los libros al alcance de los niños.

En la medida que nosotros, los docentes nos comprometamos a trabajar la lectura en voz alta con nuestros alumnos, se podrán formar niños lectores en mayor cantidad y calidad, que utilicen la lectura no sólo como fuente de placer, de información y aprendizaje, sino también como un medio de perfeccionamiento y enriquecimiento lingüístico que les permitirá relacionarse de manera efectiva con los demás.

sábado, 9 de junio de 2007

La enseñanza de la lectura y escritura en el programa AILEM-UC

Paz Baeza Bischoffshausen

En los últimos años se han producido cambios en los modelos de enseñanza-aprendizaje de la lectura y la escritura. Se ha pasado de un modelo de enseñanza de la lectura denominado de destreza, centrado en la decodificación y para todos los niños por igual, a un enfoque de aprendizaje que toma en cuenta el proceso lector, las experiencias lingüísticas del niño y la construcción del significado.
Es importante considerar el sentido de la alfabetización en la cultura.
Los niños, desde muy pequeños, comienzan a comprender las funciones particulares que la lectura y la escritura tienen en su grupo social, al mismo tiempo, toman conciencia del hecho de que el lenguaje escrito presenta formas diferentes cuando sirve para funciones distintas.
La escuela, debe desarrollar la relación con el mundo del lenguaje escrito, desde que el niño ingresa a la Educación de Párvulos (interacción con diversos géneros textuales).
Los niños adquieren el lenguaje escrito en un proceso largo y complejo, que implica para ellos una doble tarea; por una parte, acceder al código de la escritura y por otra, al lenguaje escrito.
La lectura y escritura se deben abordar, a partir de contextos en los que aparezca de forma evidente, el valor funcional de la lengua escrita. Por lo tanto es coherente proponer actividades partiendo de textos auténticos, considerando, que la mejor forma de aprender el código es intentando leer y escribir algo significativo.
Un lector que permanece alerta a lo largo del proceso de lectura, construye una interpretación para lo que lee y es capaz de recapitular, resumir y ampliar la información obtenida.
Enfrentar hoy en día el proceso de adquisición de la lectura y la escritura implica inclinarse por una propuesta metodológica interactiva cuya base se encuentra en varios modelos;
1.- El modelo Cognitivo-Social, propuesto por Vygotsky. El factor fundamental del desarrollo es la interacción social.
2.- El modelo Cognitivo-Contructivista. El alumno puede aprender de sus equivocaciones incluyendo espacios para la reflexión sobre lo aprendido y las estrategias utilizadas, favoreciendo un proceso metacognitivo.

Trabajar el lenguaje desde un enfoque comunicativo requiere renovar la enseñanza en el aula, y establecer una didáctica que permita a los alumnos una práctica lingüística en situaciones comunicativas concretas y que lleve, a través de la reflexión y la práctica, al desarrollo de los conceptos necesarios para el mejoramiento del uso de la lengua. Por lo tanto, la enseñanza tendrá como ejes la producción e interpretación de textos y tenderá al desarrollo de las competencias lingüísticas.
Según investigaciones realizadas los factores predictivos del aprendizaje de la lectura y escritura son: La identificación y segmentación de los fonemas, el reconocimiento visual ortográfico de algunas palabras en la etapa previa al aprendizaje lector y el conocimiento de las letras del alfabeto; otras investigaciones plantean la relevancia de un adecuado desarrollo fonológico en los cursos de kinder a 3º básico; Bravo señala que los resultados de numerosas investigaciones convergen en que los niños que tienen mejores habilidades para manipular sílabas o fonemas aprenden a leer más rápido.
El Programa AILEM se inclina por un modelo balanceado de enseñanza de la lectura y escritura que se sustenta en los aportes recibidos desde la teoría por una parte y por el marco experimental presentado por el Programa CELL.
Un modelo balanceado de enseñanza de la lectura y escritura cultiva y desarrolla las habilidades de lectura y escritura en contextos reales y significativos para el alumno y también desarrolla sus habilidades fonológicas. Se caracteriza por fomentar en los alumnos la lectura a partir de textos completos e interesantes para ellos. Los alumnos aprenden diferentes estrategias de lectura de acuerdo al tipo de texto, a su nivel de complejidad y al propósito con el que se lee.
Las características del modelo de enseñanza del programa AILEM, consisten en:

  • Que es un Programa:
    – Funcional.
    – Realístico.
    – Auténtico.
  • Que se desarrolla la competencia comunicativa y lingüística de los alumnos.
  • Es un proceso realizado sobre la base lingüística oral de los niños.
  • Existe un acercamiento equilibrado a los procesos de lectura y escritura combinando estrategias de lectura y escritura para comprender el significado de los textos que los alumnos leen y producen y estrategias de conciencia fonológica, semántica y pragmática.
  • Importancia de la competencia lingüística, la competencia comunicativa y la pragmática de los alumnos.
  • El niño es un agente activo que a través de los distintos recursos “construye” su aprendizaje.
  • Se propicia el desarrollo de la autonomía y del trabajo en equipo.
  • Se da importancia a la producción escrita.
  • Sala letrada y numerada.
  • Las estrategias de enseñanza son transversales a todos los subsectores de aprendizaje.
  • Traspaso progresivo de la responsabilidad: del profesor a los alumnos.
  • Debe existir un lector y escritor experto que modele y guíe constantemente el proceso.
  • Existe una evaluación sistemática de los aprendizajes.

Las estrategias de enseñanza del modelo AILEM, se definen como los procedimientos o recursos utilizados por el profesor para el logro de aprendizajes significativos en sus estudiantes, en lectura y escritura. Las estrategias son:

  • Lectura en voz alta: Estrategia mediante la cual el profesor lee a los niños un texto previamente seleccionado, para compartir con ellos el placer de leer; y actuar. Los niños comprenden que el lenguaje de los libros es diferente al idioma hablado. Introduce a los alumnos al placer de la lectura y al arte de escuchar y brinda oportunidades a los profesores de modelar las estrategias de lectura. El niño es un observador e imitador de comportamientos.
  • Lectura compartida: Estrategia a través de la cual los profesores demuestran el proceso y las estrategias de la lectura que usan los buenos lectores. Los alumnos aprenden a interpretar las ilustraciones, diagramas y esquemas. Brinda oportunidad a todos los alumnos de participar exitosamente en la lectura.
  • Lectura guiada: Estrategia en la cual el profesor apoya a cada niño en el desarrollo de habilidades efectivas para interrogar nuevos textos con un grado de dificultad creciente. Los niños se centran en la construcción del significado. Proporciona a los alumnos la posibilidad de desarrollarse como lectores individuales mientras participan de una actividad con apoyo social.
  • Lectura independiente: Estrategia de lectura individual a través de la cual se les proporciona a los alumnos la oportunidad para practicar su lectura de manera autónoma y elegir textos conocidos por él.
  • Escritura interactiva: Estrategia de trabajo colaborativo en la que el profesor y los niños conjuntamente componen y escriben un texto. Puede ser utilizada para demostrar conceptos acerca de lo impreso, desarrollar estrategias y aprender acerca de cómo funcionan las palabras. Es una oportunidad única de ayudar a los niños a ver la relación entre la lectura y la escritura.
  • Escritura independiente: Estrategia a través de la cual los alumnos, en forma individual, tienen la posibilidad de poner en práctica todas las estrategias conocidas para producir diferentes tipos de textos, con diferentes propósitos y para diferentes receptores. El alumno aplica normas de ortografía y gramática. Su principal objetivo es desarrollar por una parte, la creatividad y por otra, la utilización correcta de la lengua.
  • Centros de aprendizaje: Son actividades diferentes y simultáneas que realizan los alumnos en los diferentes subsectores de aprendizaje, en forma independiente sin apoyo de la profesora. Son actividades que sirven para practicar y transferir lo aprendido y, además, ser entretenidas y desafiantes para los alumnos.

Estas estrategias se implementan a través del traspaso progresivo de la responsabilidad que es el que guía el trabajo pedagógico en cada sala de clases. Los educadores modelan el desempeño esperado y, a continuación, los niños asumen progresivamente un mayor protagonismo con el apoyo del educador. Finalmente, para cada nivel de logro esperado, los niños tienen la oportunidad de realizar la tarea de manera autónoma y en conjunto con sus pares; así se favorece, simultáneamente, un trabajo independiente y colaborativo.
El Modelo de Enseñanza de la lectura y escritura del Programa AILEM-UC constituye un modelo que proporciona el equilibrio de las actividades de lectura y escritura, brindando el máximo de oportunidades de aprendizaje para todos los niños.

miércoles, 23 de mayo de 2007

Los procesos iniciales de lecto-escritura en el nivel de educación inicial

Ana Lupita Chaves Salas

El lenguaje escrito emerge de una necesidad de comunicarse con los demás y es el ambiente quien ejerce una gran influencia en el desarrollo de esta habilidad.
La educación inicial es el primer nivel educativo al que ingresan los niños y niñas menores de seis años.
Los “Fines de la Educación Preescolar”, se dirigen a promover el desarrollo integral de la niñez durante los primeros seis años de vida. El desarrollo de la inteligencia, la personalidad y el comportamiento social en los seres humanos ocurre más rápido durante los primeros años.
Es necesario fortalecer la educación del menor de seis años y de sus familias, tanto en el ámbito formal como informal, con el propósito de favorecer el desarrollo humano y la equidad social. Para esto, es urgente la creación de centros infantiles de calidad en todos los estratos sociales.
El nivel de educación inicial cumple funciones económicas, sociopolíticas y pedagógicas.
En un primer momento, los centros infantiles surgieron únicamente como guarderías, posteriormente se toma conciencia de su valor educativo.
Es importante mencionar, que una educación de baja calidad tiene consecuencias negativas en el desarrollo de los infantes.
La función pedagógica es la más importante en el nivel inicial, pues se ocupa de optimizar el desarrollo integral del infante, ya que considera los aspecto socioafectivo, psicomotor, cognoscitivo y nutricional, tomando como punto de partida la familia (primer agente educativo del contexto sociocultural que rodea al niño).
El sujeto construye el conocimiento a partir de la interacción con las personas, los objetos, la creación de hipótesis y su esfuerzo por comprender el mundo que lo rodea. La función pedagógica incluye, una dimensión socializadora, una dimensión preventiva y una función recuperatoria. Todo esto, con el fin de iniciar un proceso de intervención que ayude a superar problemas que puedan incidir negativamente en el desarrollo integral del infante.
Es necesario que los programas de educación inicial sean de calidad y accesibles a todos los sectores de la sociedad, ya que es incuestionable la importancia de este nivel educativo para la formación del ser humano.
El método montessoriano impulsa principios educativos como la libertad, la actividad y la autonomía; le da gran importancia a la autoeducación y al docente como guía del proceso de enseñanza y aprendizaje, y propone material didáctico autocorrector que contribuye a lograr una "educación sensorial completa y graduada".
La "escuela activa" toma en cuenta los intereses del niño y la niña, respeta las diferencias individuales, desarrolla actitudes y aptitudes para el aprendizaje, parte del juego natural, emplea materiales tridimensionales, favorece un clima de libertad y autonomía; y le da al docente el rol de facilitador o guía de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
El método ecléctico para la enseñanza de la lectoescritura, consiste en integrar diferentes aspectos de los métodos sintéticos y analíticos. Este, ha tenido gran influencia en nuestro país.
El método ecléctico para la enseñanza de la lectoescritura da gran importancia al aprestamiento para el desarrollo de destrezas y habilidades perceptivas de parte del niño, sin tomar en cuenta que este "...es un sujeto que aprende básicamente a través de sus propias acciones sobre los objetos del mundo, y que construye sus propias categorías de pensamiento al mismo tiempo que organiza su mundo". Los niños, ingresan al centro infantil con un bagaje de conocimientos que han adquirido en su hogar y en su comunidad, y a partir de estos, el docente brinda experiencias auténticas de lectura y de escritura que les permiten a los párvulos construir colectivamente el conocimiento de la lecto-escritura.
Según Piaget, los niños construyen el conocimiento mediante la interacción con el mundo que los rodea. En este proceso, se siguen una serie de etapas que están relacionadas con las capacidades mentales que posee el sujeto para organizar la información que recibe del medio.
En el proceso de interacción con el medio social y físico, el infante recibe los estímulos, los transforma mediante el proceso de asimilación, los interpreta de acuerdo con sus esquemas mentales y construye su concepción de mundo al transformar las imágenes estáticas en imágenes activas por medio del lenguaje, el juego, el dibujo y la imitación. El pensamiento del párvulo surge, a través de la acción, a partir de la cual interioriza ciertas imágenes que posteriormente, aprenderá que tienen correspondencia con un nombre, y de esa manera, se originará el lenguaje.
Piaget habla de dos tipos de lenguaje: privado (egocéntrico) y social.
El lenguaje privado está dirigido hacia sí mismo, con el fin de que el pequeño tenga control de sus acciones.
El lenguaje social busca la comunicación con otros y se concreta con la aparición del diálogo.
Vigotsky plantea que; se da una relación dialéctica entre sujeto y objeto. Según esta teoría, el párvulo, al entrar en contacto con la cultura a la que pertenece, se apropia de los signos que son de origen social para, posteriormente, internalizarlos. Vigotsky considera que el momento más significativo en el desarrollo del niño, es cuando convergen el lenguaje y la actividad práctica. El lenguaje se vuelve racional y el pensamiento verbal.
De acuerdo con esta teoría, el lenguaje se da, en un principio en el nivel social, luego es egocéntrico, y más adelante, interiorizado.
Vigotsky planteaba dos niveles de desarrollo en los niños: el nivel actual de desarrollo y la zona de desarrollo próximo, la que se encuentra en proceso de formación y es el desarrollo potencial al que el infante puede aspirar.
Los estudios de Piaget y Vigotsky, coinciden en que el conocimiento se da mediante un proceso constructivo del sujeto en interacción con el medio.
El proceso de aprendizaje de la lecto-escritura interviene en gran medida el contexto sociocultural y la función social que tiene la lengua escrita para comunicar significados, ya que, por medio de ella, se trasmite todo tipo de conocimientos, creencias y valores. Halliday, menciona siete categorías de funciones lingüísticas que se desarrollan en el contexto social y que aplican tanto a la lengua oral como a la lengua escrita:

  • Instrumental: Es el lenguaje que se utiliza para satisfacer necesidades.
  • Regulatoria: Es el que se usa para controlar la conducta de otros.
  • Interaccional: Se refiere al lenguaje para mantener y establecer relaciones sociales.
  • Personal: Es aquel que permite expresar opiniones personales.
  • Imaginativa: Permite expresar lo que imaginamos y creamos.
  • Lenguaje heurístico: Nos permite crear información y respuestas acerca de diferentes cosas que se desean conocer.
  • Lenguaje informativo: Es el que permite comunicar información.

En la apropiación de la lengua escrita es fundamental el contexto sociocultural y el uso funcional que le dé el niño al lenguaje para comunicar significados.
El lenguaje emerge de una necesidad de comunicarse con los demás, y el ambiente ejerce una gran influencia en el desarrollo de esta habilidad.
La filosofía de Lenguaje Integral es una nueva concepción de lenguaje y de ser humano en interacción, donde maestros y alumnos tienen un papel protagónico en el proceso de enseñanza y de aprendizaje como investigadores de contextos socioculturales en busca del conocimiento de las diferentes realidades. Esta propuesta se basa en las siguientes premisas:

  • El lenguaje sirve para organizar el pensamiento.
  • Sirve para aprender.
  • Sirve para comunicar y compartir experiencias con los demás.

El desarrollo cognoscitivo y lingüístico son totalmente interdependientes: el pensamiento depende del lenguaje y el lenguaje del pensamiento. Mediante el lenguaje se acceda al conocimiento. Aprender el lenguaje es aprender a dar significado, y aprender a darle sentido al mundo.
El educador trabaja la zona de desarrollo próximo ayudando a que el infante logre su desarrollo potencial mediante una oportuna intervención individual o grupal que posibilite el intercambio, la crítica, la discusión y la solución de problemas. El educador debe: crear actividades significativas que estimulen el pensamiento divergente, construir significados y buscar soluciones a las inquietudes que se presentan; pero para ello es necesario "elaborar preguntas constructivas que obliguen al sujeto a reflexionar lógicamente y a inferir situaciones". Es mediante la creación de actividades auténticas de lectoescritura, cuando se activa en el párvulo el proceso de asimilación y acomodación del lenguaje escrito.
Un salón de clase de educación inicial debe contar con un ambiente letrado, pertinente culturalmente y rico en material impreso que propicie el diálogo, el juego dramático, el dibujo, la creación de textos y actividades de lectura y escritura individuales y colectivas.
Es necesario un cambio educativo, que lleve a la transformación de este nivel; para ello, es preciso tener en cuenta los siguientes aspectos:

  • El niño construye el conocimiento en interacción con el medio físico y social que lo rodea, formula hipótesis y se explica el mundo de acuerdo con sus esquemas mentales.
  • El niño construye y reconstruye el conocimiento sobre el lenguaje escrito de la misma forma en que construye el lenguaje oral.
  • El lenguaje sirve para organizar el pensamiento, para aprender, comunicar y compartir experiencias con los demás.
  • En el aprendizaje de la lecto-escritura interviene en gran medida el contexto sociocultural que rodea a los niños, por lo tanto, es necesario partir de su cultura (de lo más significativo y cercano a su vida).
  • La función social que tiene la lengua escrita para comunicar significados y transmitir conocimientos, creencias y valores, es fundamental para el desarrollo del lenguaje.
  • El infante debe comprender que el lenguaje escrito, al igual que el lenguaje oral, sirve para comunicar ideas y pensamientos, además, transmite significados y es funcional.
  • El ambiente del centro infantil debe propiciar oportunidades para que el infante dialogue, dibuje, escriba y lea libre y espontáneamente; es decir; juegue con el lenguaje.
  • El educador debe propiciar mediante el juego cooperativo todo tipo de actividades que incentiven el desarrollo del lenguaje en los párvulos.
  • Es preciso que el educador analice y evalúe su práctica pedagógica y la congruencia con las premisas teóricas del constructivismo.
  • Es fundamental que la evaluación se perciba como un proceso continuo de análisis sobre el trabajo cotidiano de los niños.
  • Para el éxito de un programa inicial de lecto-escritura, es importante la participación de la familia en la sala de clase y en actividades de lectura y escritura propuestas en el hogar, todas con fines prácticos y divertidos.

No se trata de escolarizar el jardín de infantes, se trata de brindarles oportunidades a los niños y a las niñas para que exploren creativamente la escritura y la lectura, y reinventen el lenguaje escrito para que se apropien de él. Se trata de que los niños construyan el placer de leer y escribir.

Nidos para la lectura: El papel de los padres en la formación de lectores.

Yolanda Reyes

En el hogar, se aprende lo fundamental sobre la vida.
Hablar de lectura en el hogar es diferente a hablar de la lectura en la escuela.
El hogar proporciona el contexto, el para qué; el hogar es el nido en el que la lectura encuentra o desencuentra eso que se llama un sentido primordial.
Somos los adultos, con nuestras lecturas y con nuestras palabras, inscritas desde mucho antes de ser padres, el texto de lectura primordial que descifran nuestros niños.
Las primeras etapas en la formación del lector son:
1. Yo no leo. Alguien me lee, me descifra y escribe en mí:
En esta primera etapa de la vida, tenemos contacto con muchos textos de lectura.
En primer lugar, están los libros sin páginas (poesía de la primera infancia). Lo que cuenta aquí son las sonoridades, las repeticiones y las alternancias.
Antes del primer año de vida, nuestra experiencia como lectores ha estado profundamente ligada al afecto y nos ha enseñado mucho sobre los usos poéticos del lenguaje (función expresiva).
Tan pronto como el niño se sienta, aparecen también los primeros libros de imágenes. Son libros sencillos, quizás sin palabras que cuentan historias o muestran objetos cercanos a la experiencia del niño pequeño. Enseñan que las historias se organizan en un espacio: de izquierda a derecha (direccionalidad en sus ejercicios de prelectura).
Después de esos primeros libros y muy en la línea del desarrollo psíquico del niño, que empieza a salir de lo más inmediato para hacerse preguntas, para inventar, imaginar, soñar, tener pesadillas y sentir miedos, los relatos se van haciendo más complejos: Es entonces cuando los niños entran en contacto con hechos, peripecias y personajes que suceden en un tiempo lejano: el tiempo de la ficción. Ese tiempo mítico, que no es el presente, tiene su expresión literaria en los cuentos de hadas tradicionales o en los cuentos contemporáneos, con personajes fantásticos, de la propia región o de países lejanos, que hablan a la psiquis en formación y le dan claves para nombrar sus misterios y para intentar descifrarlos.
Las voces adultas que cuentan historias dicen cosas útiles, ciertas y necesarias sobre el lenguaje. Dicen que las palabras se agrupan unas al lado de las otras en una cadena y que, gracias a esas agrupaciones y a la posición de cada palabra en la cadena, se van construyendo y modificando los significados.
Ya sabe una cantidad de cosas sobre la lectura, aunque la escuela diga que todavía no es lector y no haya entrado ni siquiera al prejardín o al grado cero. Los padres han construido un nido completo, un entorno para la lectura, una cantidad de demostraciones viscerales a la pregunta del “Para qué leer”, que es la pregunta por el sentido vital de la lectura y que es la que, en definitiva, produce el deseo, o lo que los maestros, para simplificar llaman ‘motivación”. Cuando llega a la etapa de la alfabetización propiamente tal, el aprendizaje de la lectura se empieza a delegar al colegio.
2. Segunda etapa: Yo empiezo a leer con otros:
Esta etapa se da desde la total dependencia del lector hasta el logro de la lectura autónoma y es un largo rito de tránsito el cual se constituye, quizás, en la época más difícil para su formación. En virtud de una extraña paradoja, el proceso de alfabetización, resulta en la práctica ser, el culpable de la mayor deserción.
Es ese el momento en el que los padres resultan verdaderamente imprescindibles y es también ahí cuando deben tener más cuidado en no caer en creer que son ellos los maestros de sus hijos. La tarea de los padres recae en dar sentido y contexto al proceso por el cual están atravesando sus hijos. Resulta fundamental que los padres continúen leyéndoles buenas historias a sus hijos, sin abandonarlos en la mitad del proceso.
La entonación es algo que se construye mediante un diálogo con los sentidos de un texto; un diálogo en el que participan el lector y el texto y que siempre hay que ir desentrañado.
Es importante asegurar que se mantenga viva la fe en la magia de los libros y en sus poderes de desciframiento. Durante esta etapa ambigua en la que supuestamente un niño aprende a leer solo, aún no cuenta con las herramientas suficientes para decodificar los libros que su psiquis o su deseo de conocimiento le demandan, su poder de decodificación está atrasado con respecto a su poder de desciframiento.
Leer con los hijos, como padres, es leer por el puro placer de estar juntos, de compartir sueños, temores, intereses e incluso obsesiones y acompañar a ese hijo a confrontarse con las tareas existenciales, con los valores y con los retos de la vida que recrean los libros. Leer como padres es también acompañarlos a escoger sus libros y ayudarlos a ir formando sus propios criterios. La lectura será parte del ámbito de su intimidad y se convertirá en la brújula de una búsqueda personal a la que quizás los padres ya no estén invitados.

Leer y escribir: un enfoque comunicativo y constructivista.

Paulina Rivera.

Es imposible comprender, en nuestra sociedad, la adquisición de la lectura y la escritura por parte de los niños sin considerar el significado de la alfabetización en la cultura.
En un ambiente rico en materiales impresos, los niños comienzan a comprender las funciones particulares que la lectura y la escritura tienen en su grupo social.
El conocimiento del lenguaje escrito no es adquirido por el niño de un día para otro, sino que está dentro de un proceso complejo y prolongado en el tiempo. Por una parte, ha de acceder al código de la escritura, por otra, ha de acceder al lenguaje escrito como conjunto de los distintos géneros textuales.
En relación con este doble aprendizaje existen básicamente dos líneas explicativas que conllevan implicaciones distintas en cuanto a los planteamientos didácticos que de ellas se derivan:


a) La línea que considera que conocer el código es una condición para que los niños puedan acceder al conocimiento del lenguaje escrito.
b) La línea que considera que el conocimiento del lenguaje escrito, por una parte, y del código, por la otra, son dos saberes distintos con desarrollos propios y diferentes.


El enfoque comunicativo de la didáctica de la lengua, superando el nivel oracional, sitúa el foco de atención en el texto o discurso, reconociéndolo como la unidad real de comunicación, que está constituida por los géneros textuales que usamos en un contexto determinado, con una finalidad, y dirigidos a un destinatario.
El aprendizaje del código, en este contexto, es una actividad que tiene sentido.
Para pasar de ser un no lector, a un lector experto, se debe pasar por tres fases:

  1. La primera fase está constituida por el reconocimiento global de palabras y textos familiares.
  2. La segunda fase, los niños llegan a comprender las correspondencias entre la cadena escrita y la oral.
  3. En la tercera fase, la lectura es básicamente un reconocimiento global de configuraciones escritas.

La lectura es, ante todo, comprensión, es decir, construcción de una representación mental coherente de lo que se lee.
E. Ferreiro y A. Teberosky estudiaron cómo el niño construye sus propios conocimientos sobre la escritura y describieron la existencia de determinadas fases en el aprendizaje de la escritura:

  1. La primera fase se corresponde con el período en el que los niños diferencian ya la escritura del dibujo. Es la etapa de la escritura indiferenciada.
  2. En la segunda fase, utilizan un repertorio variado de grafías convencionales: es la fase de la escritura diferenciada.
  3. En la tercera, la fase silábica, los niños comienzan a establecer relaciones entre sus grafismos y los aspectos sonoros de la palabra (segmentación silábica de la palabra).
  4. En la fase silábico-alfabética, la cuarta, los niños se dan cuenta de la existencia de correspondencias intra-silábicas, pero no son capaces de segmentar todos los elementos sonoros de la palabra.
  5. En la quinta fase, los niños reconocen una correspondencia alfabética exhaustiva (etapa alfabética).


Los modelos cognitivos de composición del texto, señalan la existencia de los procesos implicados en la producción escrita. En primer lugar, la planificación, es decir, la selección y organización de las ideas. En segundo lugar, la elaboración del texto. En tercer lugar, la revisión, implicada no sólo en el escrito final, sino en todo el proceso de producción.
El aprendizaje no es lineal y aditivo, sino que procede por reorganizaciones de conocimientos de distinto contenido y nivel.