Ana Lupita Chaves Salas
El lenguaje escrito emerge de una necesidad de comunicarse con los demás y es el ambiente quien ejerce una gran influencia en el desarrollo de esta habilidad.
La educación inicial es el primer nivel educativo al que ingresan los niños y niñas menores de seis años.
Los “Fines de la Educación Preescolar”, se dirigen a promover el desarrollo integral de la niñez durante los primeros seis años de vida. El desarrollo de la inteligencia, la personalidad y el comportamiento social en los seres humanos ocurre más rápido durante los primeros años.
Es necesario fortalecer la educación del menor de seis años y de sus familias, tanto en el ámbito formal como informal, con el propósito de favorecer el desarrollo humano y la equidad social. Para esto, es urgente la creación de centros infantiles de calidad en todos los estratos sociales.
El nivel de educación inicial cumple funciones económicas, sociopolíticas y pedagógicas.
En un primer momento, los centros infantiles surgieron únicamente como guarderías, posteriormente se toma conciencia de su valor educativo.
Es importante mencionar, que una educación de baja calidad tiene consecuencias negativas en el desarrollo de los infantes.
La función pedagógica es la más importante en el nivel inicial, pues se ocupa de optimizar el desarrollo integral del infante, ya que considera los aspecto socioafectivo, psicomotor, cognoscitivo y nutricional, tomando como punto de partida la familia (primer agente educativo del contexto sociocultural que rodea al niño).
El sujeto construye el conocimiento a partir de la interacción con las personas, los objetos, la creación de hipótesis y su esfuerzo por comprender el mundo que lo rodea. La función pedagógica incluye, una dimensión socializadora, una dimensión preventiva y una función recuperatoria. Todo esto, con el fin de iniciar un proceso de intervención que ayude a superar problemas que puedan incidir negativamente en el desarrollo integral del infante.
Es necesario que los programas de educación inicial sean de calidad y accesibles a todos los sectores de la sociedad, ya que es incuestionable la importancia de este nivel educativo para la formación del ser humano.
El método montessoriano impulsa principios educativos como la libertad, la actividad y la autonomía; le da gran importancia a la autoeducación y al docente como guía del proceso de enseñanza y aprendizaje, y propone material didáctico autocorrector que contribuye a lograr una "educación sensorial completa y graduada".
La "escuela activa" toma en cuenta los intereses del niño y la niña, respeta las diferencias individuales, desarrolla actitudes y aptitudes para el aprendizaje, parte del juego natural, emplea materiales tridimensionales, favorece un clima de libertad y autonomía; y le da al docente el rol de facilitador o guía de los procesos de enseñanza y aprendizaje.
El método ecléctico para la enseñanza de la lectoescritura, consiste en integrar diferentes aspectos de los métodos sintéticos y analíticos. Este, ha tenido gran influencia en nuestro país.
El método ecléctico para la enseñanza de la lectoescritura da gran importancia al aprestamiento para el desarrollo de destrezas y habilidades perceptivas de parte del niño, sin tomar en cuenta que este "...es un sujeto que aprende básicamente a través de sus propias acciones sobre los objetos del mundo, y que construye sus propias categorías de pensamiento al mismo tiempo que organiza su mundo". Los niños, ingresan al centro infantil con un bagaje de conocimientos que han adquirido en su hogar y en su comunidad, y a partir de estos, el docente brinda experiencias auténticas de lectura y de escritura que les permiten a los párvulos construir colectivamente el conocimiento de la lecto-escritura.
Según Piaget, los niños construyen el conocimiento mediante la interacción con el mundo que los rodea. En este proceso, se siguen una serie de etapas que están relacionadas con las capacidades mentales que posee el sujeto para organizar la información que recibe del medio.
En el proceso de interacción con el medio social y físico, el infante recibe los estímulos, los transforma mediante el proceso de asimilación, los interpreta de acuerdo con sus esquemas mentales y construye su concepción de mundo al transformar las imágenes estáticas en imágenes activas por medio del lenguaje, el juego, el dibujo y la imitación. El pensamiento del párvulo surge, a través de la acción, a partir de la cual interioriza ciertas imágenes que posteriormente, aprenderá que tienen correspondencia con un nombre, y de esa manera, se originará el lenguaje.
Piaget habla de dos tipos de lenguaje: privado (egocéntrico) y social.
El lenguaje privado está dirigido hacia sí mismo, con el fin de que el pequeño tenga control de sus acciones.
El lenguaje social busca la comunicación con otros y se concreta con la aparición del diálogo.
Vigotsky plantea que; se da una relación dialéctica entre sujeto y objeto. Según esta teoría, el párvulo, al entrar en contacto con la cultura a la que pertenece, se apropia de los signos que son de origen social para, posteriormente, internalizarlos. Vigotsky considera que el momento más significativo en el desarrollo del niño, es cuando convergen el lenguaje y la actividad práctica. El lenguaje se vuelve racional y el pensamiento verbal.
De acuerdo con esta teoría, el lenguaje se da, en un principio en el nivel social, luego es egocéntrico, y más adelante, interiorizado.
Vigotsky planteaba dos niveles de desarrollo en los niños: el nivel actual de desarrollo y la zona de desarrollo próximo, la que se encuentra en proceso de formación y es el desarrollo potencial al que el infante puede aspirar.
Los estudios de Piaget y Vigotsky, coinciden en que el conocimiento se da mediante un proceso constructivo del sujeto en interacción con el medio.
El proceso de aprendizaje de la lecto-escritura interviene en gran medida el contexto sociocultural y la función social que tiene la lengua escrita para comunicar significados, ya que, por medio de ella, se trasmite todo tipo de conocimientos, creencias y valores. Halliday, menciona siete categorías de funciones lingüísticas que se desarrollan en el contexto social y que aplican tanto a la lengua oral como a la lengua escrita:
- Instrumental: Es el lenguaje que se utiliza para satisfacer necesidades.
- Regulatoria: Es el que se usa para controlar la conducta de otros.
- Interaccional: Se refiere al lenguaje para mantener y establecer relaciones sociales.
- Personal: Es aquel que permite expresar opiniones personales.
- Imaginativa: Permite expresar lo que imaginamos y creamos.
- Lenguaje heurístico: Nos permite crear información y respuestas acerca de diferentes cosas que se desean conocer.
- Lenguaje informativo: Es el que permite comunicar información.
En la apropiación de la lengua escrita es fundamental el contexto sociocultural y el uso funcional que le dé el niño al lenguaje para comunicar significados.
El lenguaje emerge de una necesidad de comunicarse con los demás, y el ambiente ejerce una gran influencia en el desarrollo de esta habilidad.
La filosofía de Lenguaje Integral es una nueva concepción de lenguaje y de ser humano en interacción, donde maestros y alumnos tienen un papel protagónico en el proceso de enseñanza y de aprendizaje como investigadores de contextos socioculturales en busca del conocimiento de las diferentes realidades. Esta propuesta se basa en las siguientes premisas:
- El lenguaje sirve para organizar el pensamiento.
- Sirve para aprender.
- Sirve para comunicar y compartir experiencias con los demás.
El desarrollo cognoscitivo y lingüístico son totalmente interdependientes: el pensamiento depende del lenguaje y el lenguaje del pensamiento. Mediante el lenguaje se acceda al conocimiento. Aprender el lenguaje es aprender a dar significado, y aprender a darle sentido al mundo.
El educador trabaja la zona de desarrollo próximo ayudando a que el infante logre su desarrollo potencial mediante una oportuna intervención individual o grupal que posibilite el intercambio, la crítica, la discusión y la solución de problemas. El educador debe: crear actividades significativas que estimulen el pensamiento divergente, construir significados y buscar soluciones a las inquietudes que se presentan; pero para ello es necesario "elaborar preguntas constructivas que obliguen al sujeto a reflexionar lógicamente y a inferir situaciones". Es mediante la creación de actividades auténticas de lectoescritura, cuando se activa en el párvulo el proceso de asimilación y acomodación del lenguaje escrito.
Un salón de clase de educación inicial debe contar con un ambiente letrado, pertinente culturalmente y rico en material impreso que propicie el diálogo, el juego dramático, el dibujo, la creación de textos y actividades de lectura y escritura individuales y colectivas.
Es necesario un cambio educativo, que lleve a la transformación de este nivel; para ello, es preciso tener en cuenta los siguientes aspectos:
- El niño construye el conocimiento en interacción con el medio físico y social que lo rodea, formula hipótesis y se explica el mundo de acuerdo con sus esquemas mentales.
- El niño construye y reconstruye el conocimiento sobre el lenguaje escrito de la misma forma en que construye el lenguaje oral.
- El lenguaje sirve para organizar el pensamiento, para aprender, comunicar y compartir experiencias con los demás.
- En el aprendizaje de la lecto-escritura interviene en gran medida el contexto sociocultural que rodea a los niños, por lo tanto, es necesario partir de su cultura (de lo más significativo y cercano a su vida).
- La función social que tiene la lengua escrita para comunicar significados y transmitir conocimientos, creencias y valores, es fundamental para el desarrollo del lenguaje.
- El infante debe comprender que el lenguaje escrito, al igual que el lenguaje oral, sirve para comunicar ideas y pensamientos, además, transmite significados y es funcional.
- El ambiente del centro infantil debe propiciar oportunidades para que el infante dialogue, dibuje, escriba y lea libre y espontáneamente; es decir; juegue con el lenguaje.
- El educador debe propiciar mediante el juego cooperativo todo tipo de actividades que incentiven el desarrollo del lenguaje en los párvulos.
- Es preciso que el educador analice y evalúe su práctica pedagógica y la congruencia con las premisas teóricas del constructivismo.
- Es fundamental que la evaluación se perciba como un proceso continuo de análisis sobre el trabajo cotidiano de los niños.
- Para el éxito de un programa inicial de lecto-escritura, es importante la participación de la familia en la sala de clase y en actividades de lectura y escritura propuestas en el hogar, todas con fines prácticos y divertidos.
No se trata de escolarizar el jardín de infantes, se trata de brindarles oportunidades a los niños y a las niñas para que exploren creativamente la escritura y la lectura, y reinventen el lenguaje escrito para que se apropien de él. Se trata de que los niños construyan el placer de leer y escribir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario